Escribe Paco Mira:
LA ALEGRÍA DEL Y EN EL ADVIENTO
Es que este finde es el fin de semana de
"gaudete". Solo hay dos en el año: uno en adviento y otro en cuaresma
y coincide - en ambos casos - con el tercero. Es el fin de semana de la
alegría, a pesar de la espera o de la penitencia (adviento o cuaresma), en
ambos casos hay que tomarnos lo que nos viene con alegría, porque merece la
pena.
Este fin de semana, insisto que
es el de la alegría, el protagonista vuelve a ser Juan. Es curioso como el fin
de semana pasado aparecían nombres de hombres que hoy no se lo pondríamos a
nuestros hijos, e incluso aparecían cargos que nadie sabe qué significan
(tetrarca, etc...), volvemos a hablar de nombres y de hombres conocidos: Juan.
Sí, el hijo de Zacarías, vuelve a ser el protagonista porque aún predicando en
el desierto, hay quien le escucha y quien tiene duda de lo que hay que hacer.
A Juan se le pregunta, ¿qué
hacemos?. Es probablemente la pregunta de muchos de nosotros que no entendemos
que aún intentando hacer las cosas de la mejor forma posible, no nos sale como
quisiéramos. Juan da una respuesta que cada vez nos cuesta más: el que tenga
dos túnicas, que reparta; el que tenga comida que haga lo mismo, etc.... Son
los signos y los frutos de la conversión. Muchos de los que trabajan en las
caritas de nuestras parroquias han sentido la necesidad de la conversión en la
ayuda a los más necesitados.
Pero una segunda pregunta le
hacen a Juan, quizás porque igual ya estaban haciendo lo que correspondía, pero
no veían la luz al final del túnel y Juan responde, "no exijan más de lo
que les corresponde". A veces pensamos - en alguna ocasión lo he comentado
- que Jesús no es el mago de la chistera, que no podemos exigirle aquello que
nosotros no damos. Exigimos como si echáramos una moneda en un aparcamiento y
eso nos da derecho a estar un cierto tiempo en ese lugar. No. Jesús fue el
primero que ciñéndose una toalla, se pudo se rodillas y comenzó a lavarse los
pies. Nosotros tenemos que cundir con el ejemplo y a veces éste queda muy lejos
de la realidad.
A Juan, se le sigue insistiendo
en la pregunta y por último, la autoridad, los militares, también preguntan. Y
también hay respuesta para ellos: por lo menos, no entorpezcan la labor de los
demás; no se aprovechen de otros, tengan en cuenta a los más débiles... con eso
estamos dando respuesta a lo que tenemos que hacer.
Juan es claro en su labor.
Nosotros tenemos que ser claros en los tiempos en los que nos toca vivir y en
especial en la Navidad en que queremos ser solidarios pero las cartas a sus majestades
aumentan más las desigualdades en tiempos en que más que nunca tenemos que ser
iguales. Los bienes materiales son necesarios pero hay que saber darles el
lugar que les corresponde y ubicarlos en el momento y destino adecuados.
Por ello, en este domingo de
gaudete, en este domingo de la alegría, resuena con mayor insistencia las
palabras de Juan, "alégrense, se lo repito, estén alegres". Tenemos,
en la medida en que va pasando el adviento, que ir demostrando que nuestra vida
va cambiando, que nuestra vida le va haciendo caso al Bautista, cuando llama a
la conversión.
Todos los años nos da la
oportunidad de poder hacerlo y siempre tenemos la ocasión de empezar de nuevo.
Ojala que la llegada a Belén la hagamos llenos de alegría por ser personas
nuevas que hemos sido convertidas gracias, entre otros, a Juan, el Bautista
Feliz Gaudete en el Adviento
Hasta la próxima
Paco Mira