Escribe Paco Mira:
YA TENEMOS PROGRAMA ELECTORAL.
FALTA PARTIDO

Pero fíjense por donde, este fin de
semana, quizás adelantándose a los acontecimientos, vamos a encontrar un
programa electoral. Un programa que todos asumimos, pero que ninguno lleva como
algo programático. Un programa que todos aplaudimos y que cuando a alguno de
esos políticos se les pregunta si no le importa llevarlo a la práctica, en
época de elecciones todos dicen que indirectamente está, pero que nadie ve.
Además el programa es de inmensa
actualidad: Primero que Jesús baja del monte. Se pone a la altura de todos
nosotros y nos dice dichosos ustedes los pobres. Probablemente nadie se jacta
de ser pobre, de no tener nada, por no tener, no tener lo más básico, pero aún
siendo pobres, sean felices, dichosos, bienaventurados, ... que el dinero no
agobie lo más importante como es ser feliz.
En la campaña de Manos Unidas, las
cifras son demoledoras: cada hora, mueren al menos quince niños de hambre, pero
literal. En nuestro país hay gente que no tiene lo más básico. En nuestro país
hay gente que tiene hambre, pero mucha. En nuestro país, quizás muy cerca de
nosotros, hay tripas de rugen: dichosos los que tienen hambre, porque ellos
serán saciados. Felices los que lloran, los que son capaces de derramar
lágrimas ante la injusticia, ante la negligencia, ante el abuso... porque serán
consolados.
Felices si todos los que creemos en
Jesús pero no nos escondemos, damos razón de nuestra buena alegría que llamamos
evangelio y sobre testimonio de un personaje que entregó su vida por nosotros.
Felices porque nuestro testimonio no es fácil, seremos insultados y
probablemente seremos moneda de cambio de algún gobierno que no tiene claro su
programa, pero seremos felices.
Probablemente el rico no tiene tiempo
para pensar que el guía de su vida se pueda llamar Jesús de Nazaret.
Probablemente el rico solo se acordará de un tal Jesús de Nazaret cuando le vea
las orejas al lobo y la soga le apriete más al cuello... pero está claro que
"su recompensa ya está escrita".

Ya ven: parece que se acercan las
elecciones y los partidos ya empiezan a calentar los motores. Todos hablarán de
lo que los otros no hicieron y probablemente no hablen de lo que plantean. Yo
les planteo, como programa que se lean y lo incluyan, Lucas 6,17. Me da igual
que sea un sermón del monte o que sean Bienaventuranzas. Me gustaría añadir y
que sean dichosos los que sueñan, los que se equivocan, los que son diferentes,
tantos y tantos… que son felices... Cuesta, pero , ¡da una tranquilidad y
satisfacción el cumplirlas!
Hasta la próxima
Paco Mira